Memorial en Recordación
de los Detenidos Desaparecidos (Parque Vaz Ferreira, Cerro de Montevideo), declarado
Monumento Histórico Nacional.
Ceremonia
realizada el 19 de mayo de 2014, en el Salón Dorado de la Intendencia de
Montevideo.
Palabras de Milka González , en nombre
de Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos.
Gracias
a todos por estar acá, presentes en todas las instancias y jalones que ha
tenido esta lucha por nuestros desaparecidos.
Hoy
celebramos juntos la declaración del Memorial patrimonio histórico del Uruguay,
iniciativa de la Comisión del patrimonio del MEC que agradecemos.
El
sentido de esta designación es preservar ese bello lugar y la obra sobria y
diáfana de los arquitectos Martha Kohen y Ruben Otero, honrando la memoria de
todos ellos (nuestros desaparecidos), como un lugar de necesaria reflexión, para
que esta historia que nos pertenece a todos, que ya es parte de nuestro
patrimonio, no se repita.
Reafirmar
la necesidad de aprender de ella en todos sus sentidos, en todas sus
dimensiones.
La
primera, la humana. La defensa de la vida, que creemos debe ser nuestro primer
–primerísimo– acuerdo como comunidad. Esto significa, que así como rechazamos
uno a uno todos los horrores vividos en esos años: la arbitrariedad, los
asesinatos políticos, la tortura, el abuso, las violaciones, las apropiaciones
de niños, la desaparición forzada... debemos comprometernos como sociedad a
reforzar leyes, acuerdos y prácticas que no los toleren.
Una
reflexión que nos ayude a comprender que es una historia que no termina, que
requiere de una construcción y participación permanente. Una inclusión real en
todos los ámbitos de nuestra vida, y especialmente en todos los niveles de la
educación. Que necesita profundizar día a día la verdad sobre los hechos de ese
pasado, desmantelando con el conocimiento, capa a capa, lo que el Estado
terrorista construyó. Esta historia que fue devastadora para nuestro país, no
puede integrarse si se mantiene la impunidad de los responsables, y necesita
–aunque pase tiempo como ha pasado– que la investigación y el juicio a cada uno
de los acusados continúe, sean estos militares, civiles, políticos,
profesionales. No los queremos escondidos entre nosotros, como amenaza latente.
Y
el otro gran pilar de aprendizaje es la solidaridad.
Nosotras
nunca estuvimos solas y no nos cansaremos de repetirlo. ¿Cómo renovar la fuerza
y la energía si no es con otros? Desde los comienzos de desconcierto y
desesperación cuando desaparecieron a nuestros familiares, a los caminos de la
denuncia y la búsqueda, siempre se nos tendieron manos solidarias,
comprometidas, valientes en tiempos muy difíciles. Nos ayudaron, acompañaron y
muchos son los que sostuvieron y sostienen estas banderas de verdad memoria y
justicia, banderas que no son solo nuestras, aunque sean las que nos definan
como grupo. No deben serlo. Son los individuos de una sociedad, todos, o los
más posibles, quienes deben comprometerse, exigir a los gobiernos información,
educación, participación y trabajar cotidianamente para que esta historia no se
repita.
Y
para cerrar queremos invitarlos a todos a la marcha del día de mañana. Hace 19
años que marchamos. Esta vez, la consigna es “¿Dónde están? ¿Por qué el
silencio?”
Cada
año nos sorprende y emociona la enorme participación, aquí en Montevideo y en
muchas otras ciudades del país. Mientras sea así, sabemos que vamos por buen
camino, trabajando por el futuro, y por la vida
Verdad,
memoria justicia y nunca más.
Montevideo, 19 de mayo de 2014.
Fotografías gentileza de Martha Passeggi
No hay comentarios:
Publicar un comentario